martes, 24 de febrero de 2015

De aquí para allá


Conseguir una buena motrocidad fina, que permita, entre otras muchas cosas, escribir y pintar cogiendo el lapicero/pintura/... de forma cómoda, es una tarea que nos ocupa gran parte de esta etapa de Infantil.
Se desarrolla con la práctica de múltiples acciones como: Coger, desmigar, meter, lanzar, recortar, v- desvestirse, comer, asearse...
 
El concepto de motricidad fina se refiere a los movimientos de la pinza digital y pequeños movimientos de la mano y muñeca. La adquisición de la pinza digital así como de una mejor coordinación oculomanual (la coordinación de la mano y el ojo) constituyen uno de los objetivos principales para la adquisición de habilidades de la motricidad fina.
 
En el cole, lo solemos llamar "la pincita de cangrejo" y consiste en el "juego" que hacen el dedo pulgar y el índice (también con el resto de dedos), abriéndose y cerrándose.
 
Cogiendo ideas de unas y otras corrientes educativas (de cuyo nombre no voy a acordarme, porque yo voy picoteando y haciendo mías ideas de diferente origen), he puesto en marcha un par de sanas "competiciones" que tienen a mis aventureros muy picados por conseguir mejores tiempos.
 
¿En qué consiste?
En dos recipientes, con bolitas blanditas y una pinza de las cejas...
Compiten entre dos para ver quién traspasa antes las bolas de un cuenco, al otro, sin usar, claro, las manos. Solo la pinza.
 
 
¿Ideas para casa?
 
Pasar legumbres de un vaso a otro, pellizcos de sal, harinas, azúcar,...
 
Os digo, de verdad, que hace solo unos días que lo hacemos, y que funciona verdaderamente bien.
Ya se notan resultados.
 























Un beso!!!









lunes, 16 de febrero de 2015

Háblame claro

¡Háblame claro! O de cómo confundir a nuestros pequeños solo porque tienen pocos años de vida.

Es importante que hablemos con propiedad, aunque muchas veces tengamos que explicar determinados vocablos y expresiones.

En muchos casos pensamos que, la invención de términos nuevos facilitará la vida de nuestros niños pero, ¡¡¡nada más lejos de la realidad!!!

Mamá es mamá siempre, ¿no? Y ¿por qué el chupete es el tete?

Te pongo un ejemplo muy claro y lo vas a entender muy rápido:

- Señorita Lucía: Aventurero, ¿te gusta la merluza?
- Pequeño aventurero: (cara de póker)

No sabe contestar... ¿por qué? Porque, en el mejor de los casos, mamá/papá/la abuela/el abuelo lo llama pescado.

Pescado a todo... Y digo en el mejor de los casos porque también esta el colmo de los colmos más colmados: ¡¡¡¡CHICHI DE PEZ!!!!

Otro ejemplo:

La foto que se muestra a continuación, ¿Qué es?



Unos dirán, un trozo de carne, otros seguirán con la chichi... pero, ¿qué es realmente?
UN FILETE DE TERNERA

Con estos dos ejemplos concretos quiero que te des cuenta de que, nuestros chicos y chicas no pueden, por ejemplo, despertar un criterio por la comida, saber qué les gusta y qué no, porque no saben lo que comen.
Si llamamos lentejas a las lentejas, y no legumbres, o platillos marrones, o... ¡qué se yo!, ¿por qué llamamos chichi a todo?

Querido papá que me lees:
Al César lo que es del César y al filete de ternera lo que es del filete de ternera, al salmón lo que es del salmón y al lenguado lo que es del lenguado.

Y al igual que con estos ejemplos ocurre con el pipi, el tete, el bibi, el popó, el guau guau e infinidad de palabras bisílabas que hacen a nuestros niños no hablar correctamente ni saber de lo que hablan.

Otro día hablaremos del discurso en general, de qué contarles y cómo contarles.
Pero eso...¡eso es otro tema!

Enseña a tu pequeño/alumno a hablar con propiedad, dale a probar cosas, llámalas por su nombre. Sin miedo (porque huelen el miedo...jejeje).

Espero no hacerte sentir incómodo, pero si haberte hecho reflexionar.

AH! Si quieres seguir este pequeño rinconcito, y enterarte de las nuevas publicaciones, solo tienes que escribir tu e-mail en la parte de arriba a la derecha, justo encima de mi fotografía, en un lugar como el de la foto: 



Así, estaremos en contacto.
Y si tienes algo que preguntar o aportar, por favor, ¡comenta!

viernes, 6 de febrero de 2015

Oído cocina!

¡¡¡No podía esperar para contar el día de hoy!!!

Ha sido completísimo!!

Primero, y aunque hacia fresquete, hemos ido de visita a la biblioteca de La Rioja. hemos conocido las instalaciones (muchos ya las conocían), hemos escuchado un cuento y hemos pululado por allí en busca de tesoros para leer.

Después, y aprovechando que esta semana hemos conocido y trabajado la letra "J", hemos conocido una tienda con mucha historia de nuestra ciudad, con una palabra muy riojana en su nombre: Hemos visitado la golmajería "La Golosina". además, nos has regalado unos sugus... ¡¡Qué más queremos!!

Y ahora, el propósito del post...

¡¡Hemos convertido la clase en un restaurante improvisado!!

Bueno, vamos a empezar por el principio:

Acabamos de comenzar la Unidad dedicada a los alimentos (otra de mis favoritas) y la he programado por semanas para tratar, a lo largo del mes de febrero, 4 de los grandes grupos que tenemos en nuestra dieta.

 
Esta semana tocaban frutas y verduras y, para el viernes, decidí organizar y preparar entre todos una ensalada y una macedonia de frutas que pudiéramos compartir en el aula (menú para 23! casi nada!)

Por lo poco que lleva este sitio abierto, se puede adivinar que me encanta compartir momentos (tema del que hablamos el otro día en clase. Se pueden compartir más cosas que las materiales).

Para ello, envié a los padres de mis aventureros un papel con un encargo para el viernes: 1 pepino, 4 hojas de lechuga, un racimo de uvas, 1 manzana,...

Y al llegar las 15:30 h...¡¡¡MANOS A LA OBRA!!!

 
Entre todos hemos cortado la lechuga, probado el aceite, mezclado la ensalada y ellos mismos han servido las mesas de sus compañeros como buenos camareros.

 

































Después, tocaba pelar plátanos, mandarinas, echar las uvas, mezclarlo todo bien y...
¡¡¡AL ATAQUE CON LA MACEDONIA!!!






Y como todos, todos, han probado y/o comido la ensalada y la fruta, hemos tomado como "postre" unas uvas pasas riquísimas que ha traído una de mis chicas y un sugus para terminar.






Hemos aprendido, hemos comido, hemos degustado, hemos ayudado, colaborado pero, sobre todo, hemos pasado una tarde MARAVILLOSA! tremendamente GENIAL!

Una pena no poder subir todas las fotos...porque son la pera!!




Os animo a cocinar con los peques en casa. Siempre hay algo que puedan hacer para colaborar y nos ayuda a unirnos más. Se afianzan los vínculos y se pasa un rato francamente divertido.

Estoy agotada, ¡pero repetía mañana mismo!







lunes, 2 de febrero de 2015

Cuéntame un cuento


La lectura es un tema fundamental en nuestras vidas.

Los adultos debemos ser ejemplo de ello. No solo leyendo, si no comentando lo que leemos.

En clase, cada día tenemos un ratito pequeño para los cuentos y la "lectura".

Cogen cuentos libremente, los ojean, se los cuentan a los compañeros, a los muñecos, a mí...

Yo también dedico varios momentos a la semana para la lectura.

Nos reunimos en la asamblea y nos preparamos para el cuento: "Abrimos bien los ojos...y los oídos".

Después, comentamos el cuento, qué les ha gustado más, qué menos, su personaje favorito, qué ha ocurrido en la historia...

Pues bien, hasta aquí nada nuevo (creo).

Las últimas semanas he estado probando algo nuevo para comprobar la imaginación de mis pequeños y cuánta atención prestan al cuento.

Para ello, después de contar el cuento, repartimos hojas en blanco y dejamos volar nuestra vena artística retratando el momento que más nos ha gustado del cuento.

Me gusta hacerlo de dos formas diferentes:

Un día, leemos una historia poco conocida y enseñamos las ilustraciones que van apareciendo a lo largo del libro.

Otros días, como el que os muestro a continuación, cuento un cuento tradicional de manera mucho más dramática y teatral, sin apoyarla de imágenes. De esta manera, trabajamos más la imaginación, pero nos basamos en recuerdos.

A continuación os muestro algún ejemplo de dibujos hechos sobre el cuento "Caperucita roja".
En esta ocasión, hemos introducido, además, la copia del título del cuento, trabajando de esta manera la escritura.

Espero que os guste, porque a mis pequeños aventureros ¡les chifla esta tarea!


Me gustaría aclarar que nunca (jamás de los jamases) juzgo una obra artística de mis chicos. El arte es libre y cada uno lo ve de una forma diferente. Me parece muy importante remarcarlo porque, como veis, hay trabajos de todo tipo, más o menos abstractos, con más o menos detalle y todos, todos, son GENIALES